Todo indica que en breve la Unión Europea (UE) y Chile ¡por fin!, rubricarán el pacto que moderniza el actual Acuerdo de Asociación Chile-UE, negociaciones que comenzaron formalmente en 2018 y finalizaron en 2021.
Actualizar el marco institucional a los nuevos tiempos que corren no solo en los intercambios comerciales, sino, también, en materias medioambientales o laborales es lo que corresponde, propiciara más comercio e inversiones. Debemos tener presente que este Acuerdo, es mucho más que un Tratado Comercial, incorpora aspectos políticos y de cooperación, principalmente, técnica y financiera.
En opinión de los negociadores chilenos, en relación con el nuevo contendido, estaríamos ante el tratado que promueve los más altos niveles de desarrollo sostenible de cuantos Chile a suscrito. Tengamos en cuenta que los chilenos son los líderes globales en número de Tratados de Libre Comercio (TLC) con 32, estos le dan acceso 65 países cuyo Producto Interno Bruto (PIB) en su conjunto representan el 88% global lo que es igual a más de 5000 mil millones de personas. Para la Unión Europea es el primer acuerdo para firmar que incluye un capítulo de género y comercio impulsando la igualdad de oportunidades y trato entre hombres y mujeres.
Asimismo, la modernización contendrá un estrenado apartado sobre comercio digital y tocan los retos que hoy rigen en el tráfico de mercancías. Igualmente, crece el porcentaje de productos resguardados por alguna rebaja arancelaria por parte de la UE pasando de un 94,7% a un 99,6%. En otras palabras, favorece a la casi la totalidad de las exportaciones chilenas al territorio de las 27 naciones que la componen.
Otro añadido es el relativo al mercado de las compras públicas al que los chilenos podrán acceder en igualdad de condiciones, su tamaño es diez veces más grandes que el PIB de Chile.
Hablamos de 918 productos que mejoran: 653 deberán cumplir con calendarios de desgravación. 140 acceden a cuotas “mejoradas”: carnes, ajo, preparaciones de atún, 1 línea de artículos de confitería y 1 línea de chocolates. 125 productos podrán ingresar en cuotas con arancel 0.
Al finalizar el repertorio de liberaciones de la UE -siete años el más largo-, el 96,5% podrá acceder libremente, lo cual equivale al 93% del comercio bilateral hoy en día. El siete por ciento restantes está sujeto a cuotas, pero libre de aranceles.
Sobresalen entre los productos con mejoras: Aceite de oliva, carnes de vacuno, ovina, ave, cerdo, leche, productos agroindustriales, preparaciones alimenticias, huevos, etanol, chocolates, galletas, salmón, merluza, preparaciones de atún, granos de cereal, champiñones.
Por cierto, en estos días Chile ha concluido la cuarta ronda de negociaciones para la Modernización del Acuerdo existente entre Chile y la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA, por sus siglas en inglés), que está conformada por Suiza, Noruega, Islandia y Liechtenstein.
Algunos datos de interés que nos aportan información acerca de la dimensión de la relación entre Chile y el bloque europeo. La UE sería la segunda mayor economía global con un PIB de 15,1 billones de dólares. Por sí sola en la UE tienen lugar el 29% de las exportaciones e importaciones mundiales.
Según datos del Banco Central y el Servicio Nacional de Aduanas en 2020 las compraventas entre Chile y la UE llegaron a los 15.493 millones de dólares, es el tercer socio comercial de Chile.
Tras la firma del Acuerdo de Asociación Económica, con una perspectiva de 18 años, las compraventas han crecido a una tasa promedio anual de 5,2%. Las exportaciones chilenas lo hicieron a un 4%, en tanto las importaciones lo han hecho un 6,4%.
Tomando 2020 han sido 2.148 las empresas chilenas que exportaron a la UE, 1.975 productos y servicios, en su conjunto sumaron operaciones por 6.916 millones de dólares, predominan las expediciones de cobre, nueces, salmón y trucha, avellanas, arándanos frescos y mejillones, entre otros. Los principales destinos de los envíos nacionales a la UE son Francia (1.365 millones de dólares), Países Bajos (1.284 millones), España (1.182 millones), Alemania (1.044 millones) e Italia 562 millones). También destacan Bélgica, Bulgaria y Finlandia.
A su vez 11.766 empresas chilenas importaron más de 5.185 productos diferentes por un montante de 8.577 millones, principalmente internaciones de maquinarias, automóviles, medicamentos, aparatos médicos y productos farmacéuticos. Los principales orígenes de las mercancías importadas a Chile desde la UE en el año 2020 fueron Alemania (2.298 millones), España (1.441 millones), Italia (1.112 millones), Francia (882 millones) y Finlandia (446 millones), también fueron relevantes las compras de Países Bajos, Suecia y Bélgica.
Las ventas de servicios no tradicionales a la UE alcanzaron los 133 millones, posicionándose como el tercer mayor destino. Despuntan los servicios financieros, call center, asesorías, investigación y desarrollo, TICs, audiovisuales y animación.
Por último, el stock de inversión extranjera directa (IED) de Chile en la UE al año 2020 alcanza los 7.754 millones. En cambio, la presencia de IED de la UE en Chile es igual a 65.250 millones de dólares a 2020, siendo el mayor inversionista en Chile.
Para Chile y la UE, este Acuerdo profundizara en la diversificación y ampliación de productos y servicios por ambos lados, especial importancia dan a las cláusulas de crecimiento sustentable y mantiene obligaciones de revisión más adelante para continuar reforzando el cuidado del medio ambiente y el bienestar social.
Gracias a este Acuerdo de Asociación surge un elemento valioso entre Chile y la UE, ambos comparten enfoques en materias de interés comunes en organismos internacionales, levantan posiciones conjuntas ante situaciones sobrevenidas, ello se ve reflejado en votaciones en las que toman parte.
Que tengan una buena semana. Saludos cordiales.
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