Taxistas de España y Chile deberán adaptarse a la llegada de las tecnologías digitales

España y Chile, separados por 10.407,20 kilómetros, han vivido estos días una huelga en el sector del taxi, se manifestaban contra los servicios de movilidad privados, entiéndase vehículos de alquiler con conductor (VTCs), en ambos países las protestas masivas ocuparon calles o avenidas principales de las ciudades donde han tenido lugar y recibieron el apoyo solidario de grupos de taxistas de algunos países próximos (Argentina, Reino Unido, Portugal, etc.)

¿Qué pide el colectivo del taxi en el conflicto con los VTC's?

¿Qué piden? En Chile desaprueban el proyecto del Gobierno dirigido a regular la transportación particular porque este no señala nada sobre tarifas y número de vehículos como primeras reivindicaciones. Por su parte, los taxistas españoles solicitan se lleve a la práctica la proporcionalidad 1/30 de los VTCs respecto a los taxis establecida en la Ley de Transporte de 2015. Actualmente, esta ratio se encuentra en 1/7 según ellos. Igualmente, que las facultades y control de estas medidas se traspasen a las Comunidades Autónomas. Además, se barajan fórmulas para compensar las pérdidas de valor de las licencias de taxis en el mercado informal.

En las dos naciones se practica el libre comercio respetando las normas impuestas por el regulador para garantizar una rivalidad equilibrada. Todo lo que exceda en una u otra dirección crearía agravios y descontentos. Por tanto, como en cualquier actividad debe respetarse “el juego limpio”, cumplido esto el regulador debe abstenerse de intervenir, la disrupción no puede ni debe penalizarse.

La irrupción de las nuevas tecnologías en los mercados clásicos

Estamos ante la irrupción de las tecnologías más avanzadas en el nicho de la conducción de individuos lo cual está dando lugar a un nuevo modelo de negocio más productivo, aporta valor al usuario, ahorra costes a sus dueños y sobre todo a precios más asequibles que los de la competencia.

Hablamos de las Plataformas Digitales de última generación. Estas están tomando posiciones en infinidad de negocios y sectores. La estructura empresarial de estas organizaciones conocen las ventajas proporcionada por las tecnologías digitales más modernas (Tecnología Social, Dispositivos Móviles, Big Data y Computación en la Nube), constituyen una plataforma adaptada al emprendimiento de interés que bien gestionado debe traducirse en mejores servicios y crecimiento para sus promotores.

Expertos en estas materias se refieren a ellas como “el cambio más profundo en el entorno macroeconómico global desde la Revolución Industrial”. Ya están aquí entre nosotros, operan globalmente y disponen abundante información que les permite prestar sus servicios allí donde se les demande.

¿Qué aportan las nuevas tecnologías y los VTC's?

Son softwares cuya función es perfeccionar la labor de traslación de pasajeros desplegada por estas compañías que emplean flotas de vehículos en su actividad diaria.

Al comienzo su estrategia era mejorar los índices medioambientales de contaminación en las grandes ciudades consiguiendo que el coche particular permaneciera en casa proporcionado al interesado una asistencia de alto nivel a una cuantía asumible y una reducción de material contaminante. Hoy cuentan con una amplia gama de ofertas dependiendo de la solicitud de los clientes, la cual puede extenderse a otros nichos dependiendo de la demanda. Y vaya que si lo han logrado.

La cuestión no acaba aquí. Los conocedores de lo venidero señalan al vehículo autónomo como la meta a incorporar al paquete tecnológico vigente al día de hoy. Son varias las plataformas existentes tanto en Chile como en España, sobresalen Uber y Cabyfay. En España Uber ha propuesto a los taxistas integrase en su propuesta, están trabajando en un producto específico para ellos.

Creemos estar frente a un reacomodo en un tiempo muy cercano de la figura del taxi. Lo serio es comenzar a perfilar ese futuro que ya está aquí de tal manera que los actuales actores encuentren su sitio al menor coste posible.

Con la llegada de estas nuevas herramientas tecnológicas el consumidor se resiste a pagar más por algo igual. Esto no es nuevo. Ya lo hemos visto y lo estamos viviendo en telefonía, agencias de viaje, en la venta de CD, en la automoción, prensa, ventas on-line, etc., etc. La solución pasa por sentarse en la mesa y buscar soluciones de largo alcance, no parches, evitando nuevas huelgas, lo único que estas obtienen es desquiciarnos a todos.

Tomás Pablo Roa, presidente ejecutivo de Wolf y Pablo Consultores, S.L.